¡Que noche la de Curry!

A Steph Curry no suele pasarle seguido. Es más, generalmente, siempre termina siendo el héroe de la película, pero en esta oportunidad casi terminó siendo el villano.

Sucedió en la noche del sábado 4 de mayo de 2019 en el Toyota Center de Houston, a donde los Golden State Warriors llegaron para afrontar ante los Rockets de James Harden el tercer partido de una de las semifinales de la Conferencia Oeste.

El encuentro fue tan parejo que terminó yendo a tiempo suplementario, y fue allí en que una mala noche, terminó siendo para Curry, una noche de pesadilla, para olvido.

En esos 5 minutos finales, Curry no sólo erró todo lo que tiró, sino que también marró una bandeja y una volcada, cuando frente a si no tenía rivales.

No fue mi momento más fino”, reconoció Curry al final de la noche.

Los Warriors terminaron perdiendo 126-121, como para que la noche de Steph sea más oscura.