La hija de Steve Jobs prepara su debut en Lima 2019

Bien lejos del mundo cibernético que logró conquistar su padre, Steve Jobs, antes de su muerte, y muy cerca de una de las máximas pasiones de su vida, los caballos. Así estará por estas horas, seguramente, Eve Jobs, la hija menor del hombre que co-fundó Apple y cambió el paradigma de la computación, porque mañana hará su debut en los Juegos Panamericanos de Lima 2019.

La deportista estadounidense, de 21 años, participará de la competencia de salto individual ecuestre. Lo hará a partir de las 13 de nuestro país en la Escuela de Equitación del Ejército, escenario ubicado en el distrito de La Molina y con capacidad para 1.150 visitantes. Eve también está inscripta en saltos por equipos.

Una de las herederas de la fortuna que dejó Steve Jobs al fallecer en 2011, cuando ella tenía 13 años, hará su estreno absoluto en este tipo de competencias continentales.

Por lo pronto, la menor del clan Jobs viene de disputar la Nation’s Cup en Falsterbo.

La jinete estadounidense, cuando sus tiempos se lo permiten, entrena en un rancho en la Florida, que su madre, Laurene Powell Jobs, compró por una suma millonaria en en 2016.

Allí es vecina de alguien que comparte no sólo la condición de heredera de una fortuna sino también la pasión por los caballos: Jennifer Gates, la hija nada menos que de Bill Gates.

“La equitación me ha enseñado independencia, dedicación y perseverancia, que puedo aplicar a todos los ámbitos de mi vida”, señaló al portal de la CNBC de Estados Unidos Eve Jobs, quien combina su pasión con la equitación con los estudios, ya que planea graduarse en 2021 en la Universidad de Stanford.

Foto: Instagram Eve Jobs