Colón y una pasión que no conoce fronteras

Según Google Maps, son 876 los kilómetros que separan el estadio de Colón y La Nueva Olla de Asunción, escenario donde el Sabalero intentará este sábado obtener su primera estrella internacional en la final de la Copa Sudamericana, ante Independiente del Valle de Ecuador.

Es esa distancia, en aproximación, la misma que los hinchas rojinegros deberían recorrer para presenciar, por caso, un juego ante Aldosivi de Mar del Plata. Incluso es menor el trecho si se lo compara con el viaje que deberían realizar para visitar a Godoy Cruz en el Malvinas Argentinas de Mendoza.

Pero este viaje tiene algo diferente. Su sabor, claramente, es especial. Y es por eso que el pueblo Sabalero se volcó a la ruta, con el objetivo de llegar, después de unas 11 horas de viaje, en el mejor de los casos, a la capital guaraní para acompañar a Luis Pulga Rodríguez y compañía.

Tantos fueron los hinchas de Colón que viajaron hacia Asunción que colapsaron el paso fronterizo desde Argentina hacia Paraguay. En horas de la tarde, la fila de automóviles abarcaba 24 kilómetros.

Esto obviamente provocó demoras en Clorinda, pero nada empañó la ilusión de los hinchas que sueñan con conseguir este sábado la primera conquista continental.

Quienes se adelantaron, por vía terrestre, aérea y hasta cruzando en balsa, realizaron un banderazo de apoyo al plantel, que reconoció el campo de juego de La Nueva Olla, donde mañana intentará cristalizar su deseo.