Selección Argentina: El club de los “olvidados”

Foto: Prensa Copa América

El dato, frío, y quizás hasta injusto, no deja de llamar la atención: de los 11 titulares de la selección Argentina ante Uruguay, más de la mitad no alcanzó a debutar en la Primera División de nuestro país o no llegó a afirmarse en su equipo.

Es apenas una apostilla colorida, que para nada sirve de ejemplo para graficar el nivel actual de estos futbolistas, muchos de ellos afianzados en clubes de las principales ligas del mundo. Pero no deja de ser curioso. Al mismo tiempo, valoriza la tarea del entrenador, Lionel Scaloni, equivocado a veces en sus conceptos pero al parecer acertado en la elección de los jugadores.

El repaso comienza en el arco. Emiliano Martínez no llegó siquiera a debutar en Independiente, donde realizó su formación como futbolista. Dibu se fue tempranamente a Arsenal de Inglaterra y después de probar suerte en varias latitudes, actualmente está asentado en Aston Villa. El otro jugador sin actividad en la Primera División argentina es, nada menos, que Lionel Messi, aunque su presencia en la selección Argentina, claro, nunca estuvo en duda.

Cristian Romero tampoco jugó demasiado en la máxima categoría del fútbol local. Cuti, el último acierto de Scaloni, pasó de llamar la atención de los clubes argentinos más importantes con la camiseta de Belgrano de Córdoba, a dar el salto importante hacia Europa. Allí, el cordobés que pasó por los seleccionados juveniles argentinos, creció lentamente, fue comprado por Juventus y viene de brillar en Atalanta. De hecho, la última temporada fue reconocido como el mejor defensor de la Serie A.

En el mismo grupo que Romero, el de los jugadores que debutaron pero no llegaron a despegar en las canchas autóctonas, se encuentran Nahuel Molina Lucero, Rodrigo De Paul, el autor del gol del triunfo ante Uruguay Guido Rodríguez y Leandro Paredes.

El caso de Molina Lucero es el más reciente. Sin lugar en Boca, probó suerte en Defensa y Justicia y Rosario Central, antes de comenzar su carrera en Udinese de Italia. Antes, De Paul tuvo dos pasos por Racing Club, donde debutó y al que regresó después de una breve y no tan buena experiencia en Valencia. Su presente, también en Udinese, lo puso en la vidriera y varios poderosos de Europa, como Atlético de Madrid y Juventus, ya posaron sus ojos en él.

Guido Rodríguez, por su parte, transitó un camino similar al de Molina Lucero. Sin continuidad en River, el volante central buscó minutos en Defensa y Justicia, luego se afianzó en México con las camisetas de Tijuana y América, y por último dio el salto a Betis de España.

Por último, Leandro Paredes, ausente en la noche del viernes por una lesión, se fue de Boca después de cuatro temporadas, con un puñado de partidos encima. El camino fue cuesta arriba para el mediocampista bonaerense, pero después de pelearla en Chievo Verona, Roma, Empoli y Zenit, hoy disfruta de un gran presente en París Saint Germain, uno de los poderosos europeos.

En el lado opuesto a ellos se encuentran Nicolás Otamendi, Marcos Acuña, Lautaro Martínez y, quizás en menor medida, Giovani Lo Celso. Todos ellos sí alcanzaron a destacarse en la Primera División Argentina antes de marcharse.

Lo concreto que el que proceso de ensamblado de la selección Argentina deja un producto que por ahora no luce, y que quizás no se encuentra apto para exhibirlo en un escaparate. Sin embargo, al menos por ahora, es efectivo. El club de los “olvidados” para el fútbol local, junto a quienes se ganaron un nombre en el ámbito doméstico y luego brillaron el Europa, tracciona al conjunto nacional hacia la ilusión de romper el maleficio de 28 años sin títulos.