Bayern Munich, su club, difundió la noticia: a los 75 años falleció Gerhard Gerd Müller, el goleador más grande que dio el fútbol de Alemania y durante años el máximo anotador de los Mundiales FIFA. El ex delantero sufría un estado avanzando de Alzheimer que derivó en su muerte.
En una inolvidable final de la Copa del Mundo 1974, disputada en Alemania, la espectacular Holanda (ahora Países Bajos), aquella Naranja Mecánica de Johan Cruyff, era la favorita ante los locales y a los 2 minutos ya ganaba 1-0.
Pero pasaron cosas, entre ellas la presencia de un incontrolable Müller, que coronó su actuación convirtiendo el gol del triunfo, en el 2-1 que le daría el triunfo a Alemania.
Fue su gol número 14 en Mundiales, sumando los 10 que convirtió en México 1970 y los 4 en Alemania 1974. Ese récord sería superado en 2006 por el brasileño Ronaldo y en 2014 por el también alemán Miroslav Klose, pero estos dos futbolistas distribuyeron sus goles en cuatro Copas del Mundo.
No sólo en Mundiales mostró su capacidad goleadora Müller, bautizado El Bombardero de la Nación. En Bayern Munich, donde debutó en 1964 y continuó hasta 1979, anotó 568, en 611 partidos oficiales, y considerando sólo la Bundesliga, que lo mantiene como el futbolista con mayor cantidad de conquistas, fueron 365 goles en 427 partidos. En 7 temporadas fue el máximo goleador de la Bundesliga.
Ocho veces salió campeón nacional con Bayern Munich: 4 de la Bundesliga y 4 de la Copa de Alemania. En competencias internacionales. fueron 5 sus vueltas olímpicas: 3 Copa Europa (actual Champions League), 1 Copa Intercontinental y 1 Recopa de Europa. En todas las finales, dejó su sello goleador.
En la Selección de Alemania fue un ícono permanente: metió 89 goles en 71 partidos. Y en el cierre de su carrera, en Fort Lauderdale Strikers mantuvo su romance con la red, amargando a los arqueros de la Liga de Estados Unidos.
Se destacaba por su inteligencia, sentido de ubicación y oportunismo dentro del área. En ese territorio era explosivo y letal. El cabezazo, además de la potencia y precisión de sus remates, era otra de sus armas principales.
Finalizada su carrera de futbolista, trabajó como entrenador en las divisiones inferiores de Bayern Munich. Hasta que hace seis años debió retirarse debido al avance del Alzhéimer.