Crece el optimismo en torno a la presencia del argentino en San Siro contra los azulgrana. Mañana entrenará con el grupo. Pavard ya está recuperado.

El Inter confía en recuperar a Lautaro. En Milán aumenta el optimismo sobre la presencia del delantero argentino contra el Barça: el lunes está previsto que vuelva a entrenarse con el grupo tras varios días trabajando en solitario en el gimnasio. El segundo entrenador nerazzurro, Massimiliano Farris, declaró tras la victoria ante el Verona que “Lautaro hará lo imposible por estar”, y aunque “por ahora es más un ‘no’ que un ‘sí’, hay esperanza”.
Los exámenes del viernes confirmaron una elongación, que normalmente necesita una decena de días para recuperarse, pero descartaron una rotura en los flexores del muslo izquierdo, que era la lesión más temida en el vestuario. Tanto el Toro como Inzaghi coinciden en que en la noche de San Siro vale la pena arriesgar algo más de lo normal: con una final de Champions en juego, el punta querrá jugar aunque sea con algo de dolor.
Salir tras la primera parte de la ida evitó consecuencias peores y ahora queda una única duda: si será titular o no. Su presencia, al menos en el banquillo, ya parece segura. Una esperanza que no deja de crecer con el paso de las horas, al igual que en el caso de Pavard. El defensa, ausente en los duelos ante Barcelona y Verona por sus molestias en el tobillo, ya se ha reincorporado a los entrenamientos con sus compañeros y, salvo imprevistos, volverá al once de Inzaghi para la vuelta frente a los azulgrana.
Los titulares de los nerazzurri, entonces, empiezan a coger forma. Sommer en la portería, defensa formada por Pavard, Acerbi y Bastoni; Dumfries y Dimarco en las bandas; Barella, Calhanoglu y Mkhitaryan en el mediocampo; Thuram y uno entre Lautaro y Taremi arriba.
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