Cuando River despliega su jerarquía es imparable; lo comprobó, también, Gimnasia y Esgrima

River Plate derrotó a Gimnasia y Esgrima La Plata 3-1, en el estadio Monumental, por la undécima fecha de la Zona A de a Copa de la Liga. El Millonario lidera con 21 puntos, mismo puntaje que Vélez Sarsfield pero con mejor diferencia de goles.

El Lobo pegó primero, cuando Benjamín Domínguez aprovechó un error de Paulo Díaz y se fue rumbo a Franco Armani para superarlo con una buena definición,, a los 10 minutos. Pero River Plate jugaba mejor y ya daba la sensación que esa ventaja inicial no iba a ser duradera.

La jerarquía y la riqueza técnica del equipo de Martín Demichelis fue quedando en evidencia con el paso de los minutos. Y con un golazo del Diablito Claudio Echeverri, gambeteando y metiendo un espléndido zurdazo equiparó el resultado a los 28 minutos.

El partido era interesante, porque Gimnasia y Esgrima no se achicó ante la jerarquía de su rival y aprovechando espacios también llegaba, con riesgo, al arco de Franco Armani. En ese ida y vuelta lucía más la riqueza de River Plate, pero el equipo de La Plata aportaba lo suyo.

Cuando finalizaba el primer tiempo una tremenda jugada colectiva acabó con el gol de Miguel Borja, sin embargo fue anulado por una posición adelantada del colombiano, correctamente sancionada. Pero fue una muestra de la lucidez del Millonario.

Con un poco de fortuna, el local se puso arriba a los 24 minutos del segundo tiempo. Leandro González Pirez pateó desde afuera del área y más allá del mérito de su remate la pelota se desvió en la cabeza de Felipe Sánchez descolocando al arquero Nelson Insfrán.

Con Gimnasia y Esgrima sin resignarse y River generando juego, llegó, a los 40 minutos el último festejo del Millonario. Participaron tres jugadores que habían ingresado desde el banco, ratificando la calidad y cantidad del plantel: la empezó Esequiel Barco, la siguió Ignacio Nacho Fernández con la asistencia y Facundo Colidio con un toque corto anotó.