Vélez e Independiente justificaron la famosa frase: “el resultado los califica”

Foto: Vélez Sarsfield

Vélez Sarsfield e Independiente empataron 0-0, en el estadio José Amalfitani, en un flojo y deslucido partido correspondiente a la tercera fecha del campeonato de la Liga Profesional.

De entrada se insinuó mejor Vélez, con presión alta y determinación para intentar llegar. Ese entusiasmo duró menos de diez minutos. Independiente buscaba salir limpio desde el fondo y después seguir intentando hacerse camino con pelotazos.

Y todo se tornó confuso, lento, interrumpido. Todos corrían, nadie frenaba la pelota y pensaba. Kevin López era de los pelotas que le daba algo de lucidez al juego. Así, entre imprecisiones, falta de idea y audacia se cerró un primer tiempo que tuvo como única jugada de emoción una falla defensiva de Independiente que Lucas Janson, picando la pelota, no pudo aprovechar.

El problema es Vélez no es nuevo, se viene reiterando: carece, en la formación titular, de un generador de juego, el 10 que arme y haga jugar y sus tres delanteros titulares se notan incómodos en la cancha y sin saber donde ubicarse. Pratto, con su incansable voluntad, Janson, siempre intentando aportar peligro, y Bou, alternando más malas que buenas, rotaron siempre y nunca encontraron un lugar favorable.

Independiente se está construyendo y este recambio que incluyó técnico -debutante en la categoría, además- y mayoría de futbolistas lleva su tiempo. Se intenta plasmar una idea, pero aún carece de fortaleza y raíces sólidas. Y pronto, a los 9 minutos, perdió a Edgar Elizalde, quien salió lesionado.

Nada cambió en el segundo tiempo, o al menos hasta el minuto 30, a pesar que hubo varios cambios. Cuesta entender los hechos por el Cacique Medina -se fue silbado e insultado por los hinchas locales-: con cuatro delanteros en cancha (a Janson se le sumaron los pibes Julián Fernández, Abiel Osorio y Santiago Castro) pero con agujeros en el mediocampo, entonces los de arriba sufrían problema de abastecimiento. Y eso que la defensa de Independiente reiteró imprecisiones y desaciertos.

Leandro Stilliano hizo variantes más lógicas: adentro Martín Cauteruccio, Juan Cazares y Baltasar Barcia, buscando profundidad y llegada. Justamente los tres ingresados, a los 14 minutos del segundo tiempo, tuvieron chances para darle a Independiente los tres puntos en el tramo final del partido.

Un remate bajo y esquinado de Cauteruccio salió cerca; lo mismo que un disparo desde afuera de Barcia. Y un tiro libre de Cazares motivó una gran tapada de Leonardo Burián.

El Fortín sólo contabilizó como chance neta un disparo, de afuera, de José Florentín que salió desviado.

Si el partido era penoso por su nivel, una serie de discusiones entre los jugadores de ambos equipos y algunos intentos de demorar y cortar de parte de los visitantes, lo tornaron más anodino. Y así terminaron, más allá de esas tres ocasiones claras de Independiente, como lo merecían: con el cero a cero calificándolos.