Vinicius reacciona ante Mbappé

El brasileño, seis tantos en los últimos cuatro partidos, se especializa en golear por dentro con la llegada de Kylian en el horizonte. Mantiene el regate y mejora el remate.

El ligero apagón goleador de Bellingham, que metió 17 goles en los primeros 23 encuentros del Real Madrid esta temporada, amenazaba con hacer mella en el rendimiento blanco. El inglés ha crecido en muchas otras facetas del juego, pero le cuesta aparecer como rematador últimamente: sólo tres goles en 2024, aunque no le han ayudado los problemas físicos ni los disciplinarios (ya ha cumplido sus dos partidos de sanción tras la roja de Mestalla). Sin embargo, en ausencia de Jude ha crecido otra figura a la que las lesiones no le permitieron arrancar a principios del curso, pero que ya está en modo nueve: Vinicius.

El brasileño sufrió dos lesiones musculares entre agosto y diciembre de 2023 que le privaron de disputar 11 encuentros en total. Ausencias que deberían haber hecho mella en sus cifras, pero este Vinicius “con la flechita para arriba”, como dijo él mismo tras su doblete en Pamplona, va camino de volver a batir su plusmarca personal: en la 2021-22 hizo 22 goles, el curso pasado fueron 23 y en este lleva 18, a nueve jornadas del cierre del campeonato y con al menos dos duelos garantizados en Champions. Necesita seis dianas más para mejorar su récord, pero ha entrado en ebullición goleadora y, a este ritmo, todo está a su alcance: ha visto portería en los cuatro últimos partidos del Madrid, en los que ha anotado seis goles. Y su frecuencia realizadora es mucho mayor que en las dos pasadas campañas: en la 2021-22 veía portería cada 194 minutos; en la 2022-23, cada 207′; y esta temporada ya va por 128′ minutos, y bajando, pues la pasada semana era de 138′…

Esta temporada es la constatación de que su transformación de extremo especialista en atacante total es un hecho. No es un asunto menor, pues la muy probable llegada de Mbappé al Madrid va a obligar al brasileño a sacar a relucir esa versatilidad cuando el francés aparezca por el perfil izquierdo, sea de inicio o sea en momentos concretos del partido en los que puedan intercambiar posiciones. Los datos respaldan que mantiene el peligro en el regate y a ello ha añadido filo: hace un remate cada 35 minutos (45′ y 50′ en las dos pasadas campañas) y tira entre palos cada 57′ (antes, 68′ y 78′); su porcentaje de regates buenos se mantiene en el 39%, como la pasada campaña, así como su frecuencia para intentar el regate (10′; el curso pasado, 9′) y para hacerlo con éxito (27′; antes, 24′).

En el remate, la gran asignatura pendiente de Vinicius cuando aterrizó en el Madrid en el verano de 2018, ya saca sobresalientes; ahora le queda mejorar en la disciplina, un área en que anda últimamente disperso, pues ha visto tres amarillas en los tres últimos partidos de Liga. Una situación que, por lo pronto, le provocará no estar para recibir al Athletic en el Bernabéu tras el parón, el domingo 31 de este mes de marzo.