Xavi anula el entrenamiento

El técnico desconvoca la sesión de este jueves para que los jugadores desconecten y cambien de ‘chip’. Sólo se han pasado Gavi, Pedri y Sergi Roberto.

Xavi Hernández había planificado una semana sin ningún día de descanso para hacer frente los partidos ante el PSG y el Real Madrid. Sin embargo, la dolorosa eliminación de la Champions y las secuelas posteriores con la rajada de Ilkay Gündogan, señalando a algunos compañeros por la derrota ante el campeón francés, ha obligado al entrenador a hacer un replanteamiento, consciente que el equipo necesitaba desconectar ante tanta presión y malos rollos. Si bien el día después a la derrota sí hubo sesión de trabajo, los técnicos ya detectaron un ambiente muy enrarecido y poco beneficioso para trabajar, fomentado además por las polémicas declaraciones del centrocampista alemán, que tal como explicamos en AS, crearon una fuerte división en el grupo, ya que no todos se mostraron en contra de que el jugador expresara públicamente sus reproches hacia algunos compañeros.

Tras valorar con el staff esta incómoda situación que, sin duda, en nada beneficia al grupo, Xavi decidió dar este jueves día de descanso a la plantilla, anulando de esta forma la sesión de trabajo. De hecho, sólo se han pasado esta mañana por la Ciutat Esportiva el capitán Sergi Roberto, junto a Pedri y Gavi, este último en su largo proceso de rehabilitación de una rotura de los ligamentos cruzados.

Evidentemente, el equipo llega al Clásico del domingo en unas circunstancias muy negativas. Y no sólo por la eliminación en la Champions, sino porque además se enfrenta a un rival crecido en todos los sentidos, tras dejar fuera al Manchester City, y que, para más ‘inri’, cuenta con una ventaja de ocho puntos -incluso un empate se podría considerar como positivo para los blancos- y con una afición totalmente volcada, tras la heroicidad que se vivió este miércoles en el Etihad. El escenario, sin duda, es muy desalentador para los blaugrana.

De ahí que Xavi ha concedido un día de fiesta a la plantilla, con el objetivo prioritario de hacer un reset, consciente que el domingo está en juego toda la temporada. Una derrota o un empate no sólo sentenciaría LaLiga sino que sería su epitafio definitivo en el FC Barcelona, con una reunión pendiente la próxima semana con Joan Laporta para ratificar su decisión de marcharse el 1 de julio.