Ginóbili: su nueva vida, Campazzo, Deck y la Selección “que ilusiona”

Habló de la Argentina

Emanuel Ginóbili, el mejor basquetbolista argentino de la historia, brindó hoy una entrevista en la que contó cómo pasa sus días desde el retiro, pero también se refirió al momento de Facundo Campazzo en la NBA, a la llegada de Gabriel Deck a la mejor liga del mundo y a un seleccionado argentino “que ilusiona”.

El bahiense confió que en su primer año como exjugador habrá “visto un partido y medio”: “Necesitaba desintoxicarme”, explicó en una charla con FM Urbana.

Pero hay cosas que se llevan en la sangre, y la pasión de sus hijos por la naranja hizo que Manu volviera a meterse de lleno en el mundo que más lo extraña.

“Se va incrementando más por un par de razones: a mis hijos les gusta, quieren mirar, seguir a sus jugadores. Cada uno tiene su tribu. Y después porque está Facu y querés que le vaya bien, tenés piel y demás. San Antonio, por lo que representa. Y ahora se viene Tortu. Después, Bolmaro, Vildoza…”, enumeró los motivos que lo hicieron volver a interesarse por el básquet.

Ahora su desafío deportivo, fuera de la ultracompetitividad de la NBA, viaja sobre dos ruedas.

“Trato de mantener forma física. Nunca me gustó hacer algo aeróbico, odié toda la vida correr y no me veo corriendo. Exploré el tema remo, pero me resultó medio embole, siempre adentro, en el mismo lugar. Descubrí la bicicleta, que es una mezcla de cosas. Me divierte, me entusiasma, me mantiene en forma y siempre trato de hacer un poquito más”, indicó.

Luego de un par de años, Campazzo llegó a Denver Nuggets para reemplazar la atención de los argentinos por la NBA, tras el retiro de Ginóbili.

“Está mucho mejor de lo que creía. Pensé que iba a jugar menos. Es un equipo muy bueno adelante, con jugadores de mucho gol. Es un equipo distinto al resto, en el que el centro lleva la pelota. Nosotros estamos habituados a que el base lleva la pelota, y ése es un básquet que no va más. Por ahí algunos equipos lo hacen, pero hoy la llevan el 3, el 4, el 5, el que sea”, analizó el presente del cordobés.

Y agregó: “Se tiene que ir acomodando. Necesita tiempo, necesita que lo conozcan sus compañeros, que lo conozca el técnico, que entiendan todo lo que puede dar. A todos nos pasó en el primer año, hay que pelearla, ganarse un nombre, el respeto. Les pasó a Luis (Scola), al Chapu (Nocioni), a Fabri (Oberto), a mí…”.

Luego, ante el inminente desembarco de Deck a Oklahoma City Thunder, recordó que hace tres años, cuando él todavía estaba en los Spurs y le tocaba el turno del draft NBA al santiagueño “estaba último entre los proyectos de San Antonio”, pero “a partir de ahí fue creciendo y creciendo”.

Incluso rememoró aquel día, durante el Mundial de China en el que Argentina fue subcampeón en 2019, en el que nada menos que Kobe Bryant le señaló a Deck y lo destacó por sobre el resto.

“Tortuga venía con una carrera muy saliente y empezaba a ganar protagonismo en Madrid. Ya mostraba sus atributos y su capacidad. Kobe lo vio antes que yo”, admitió.

Finalmente, el oro olímpico y cuatro veces campeón de la NBA, expresó la ilusión que le genera la nueva camada del seleccionado argentino para los próximos Juegos de Tokio: “Lo que hicieron en China fue increíble, inesperado. Sobrepasó todas las expectativas, fue conmovedor y obvio que ilusiona. Pero no jugás solo, depende de los rivales, de la zona que te toca… Hay un partido que jugaste mal 5 minutos, y el rival se agrandó y estás afuera. Entonces es muy difícil, pero este presente de muchos de los chicos de la Selección ilusiona. Ahí estaremos hinchando desde lejos”.