Alarma nacional por Mbappé

Dejarle una temporada en la grada incendiaría Francia a un año de la disputa de los Juegos Olímpicos de París. La alcaldesa de la ciudad criticó al PSG.

París, concretamente Poissy, a las afueras de la capital francesa, se ha convertido durante los últimos días en el epicentro del fútbol. Kylian Mbappé lleva desde el pasado viernes ejercitándose en solitario en la ciudad deportiva del PSG, que decidió descartarle de la gira por Japón después de que el delantero hiciera caso omiso a todos los órdagos que le ha ido lanzando Nasser Al Khelaïfi a lo largo del verano.

La situación es compleja, inédita en el mundo del fútbol por la importancia del jugador, extraña, pero no deja de ser una medida que utilizan muchos equipos en Europa por razones deportivas. El problema radica en que su club, el PSG, ya le ha comunicado a su entorno que no va a volver a jugar en París salvo que acepte una renovación, algo que no se va a producir porque Mbappé no tiene nada que decidir desde que el 13 de junio enviara una carta a la sede de la entidad francesa en la que manifestó su voluntad de no renovar hasta 2025 y sí cumplir el último año de contrato que le resta.

Para Francia, que su ícono mundial, que el niño prodigio de Bondy, París, que el mejor jugador del mundo en definitiva se quede un año en la grada no es una opción contemplada por nadie. Primero, porque supondría un agravio para la imagen del PSG, el equipo más laureado del fútbol francés, y segundo porque el año que viene, en julio de 2024, se disputan los Juegos Olímpicos en París.

La cita olímpica es una fecha marcada en rojo en el calendario de Kylian Mbappé, que nunca ha escondido su deseo y su sueño de guiar a Francia hacia el oro olímpico. Si el PSG decide prolongar su aislamiento más allá de septiembre, hay distintos actores que entrarán a intermediar. Uno de ellos, el Sindicato de Jugadores, la UNFP, que ya ha comunicado a través de su presidente, Philippe Piat, que no titubeará a la hora de tomar acciones legales para que el conjunto parisino reintegre en la dinámica del primer equipo al capitán de la selección francesa.

No han tardado en llegar las reacciones en el ámbito político. Emmanuel Macron, amigo de Mbappé, medió el año pasado en la renovación, inesperada porque se daba por hecho que iba a firmar con el Real Madrid, del crack del PSG, pero fue este lunes cuando la Alcaldesa de París, Anne Hidalgo, la primera en pronunciarse respecto a su situación. “Kylian es un jugador extraordinario y tenemos que mantenerlo en París. Creo que también era su deseo quedarse el mayor tiempo posible. La pregunta es: ¿a qué juega el PSG?”, aseguró.

Hidalgo, que mantiene un pulso con Al Khelaïfi al reiterarle durante el último año su negativa a venderle el Parque de los Príncipes, ya ha instado al presidente a que recapacite y a que no deje un año en la grada a Kylian Mbappé. El PSG no tiene el respaldo de la ley para hacerlo. Según el artículo 507 de la Carta Profesional de Jugadores, firmada por la LFP, Federación Francesa y la UNFP, si el 1 de septiembre, una vez finalizado el mercado, el club no ha conseguido venderle, deberá reintegrarlo en la dinámica del primer equipo.

El precedente que tiene Mbappé para ampararse ante la justicia contra el PSG es el de Hatem Ben Arfa en 2017. Al Khelaïfi, que esgrimió que el talentoso jugador francés se había “reído” en público de su acento, decidió fulminarlo y le aisló completamente en París. La Comisión Jurídica de la LFP se pronunció en el caso y obligó al club parisino a recapacitar, reintegrándole con el resto de la plantilla aunque Emery, el entrenador por aquel entonces, no volvió a darle minutos.

El Real Madrid, no obstante, mantiene la calma y no se moverá por Kylian Mbappé. Es el mensaje que llega desde las altas esferas de Chamartín, que son conscientes de que el futbolista quedará libre en un año, y no se vería obligado, como sí este verano, a pagar coste de traspaso. Además, ahora, el PSG no tiene la sartén por el mango y no puede obligarle a salir traspasado. Francia, atenta al culebrón de Mbappé, no tolerará verle un año sentado en la grada, consciente de que los Juegos Olímpicos, en París, son una cita a la que el campeón del mundo en 2018 quiere llegar en plena forma.

AS