La Selección Argentina, de una victoria histórica ante Brasil tras los incidentes en el Maracaná a la bomba de Lionel Scaloni sobre su continuidad 

Foto: Prensa AFA

Parecía una noche soñada para la Selección Argentina en el estadio Maracaná, porque un triunfo histórico por 1-0 frente a Brasil había opacado la represión que la Policía local ejecutó contra los hinchas albicelestes en las tribunas del estadio, antes de iniciar el encuentro válido por la sexta fecha de las Eliminatorias Sudamericanas con vistas al Mundial de México, Estados Unidos y Canadá 2026. 

Sin embargo, después de la euforia que provocó el enorme salto y aún más imponente cabezazo de Nicolás Otamendi para darle la victoria al campeón del mundo y causar la primera derrota brasileña como local en el camino hacia un Mundial, en la sala de conferencias del mítico estadio carioca explotó una bomba impensada: Lionel Scaloni puso en duda su continuidad como entrenador del representativo nacional. 

“Ahora toca una cosa importante que quería decir”, prologó en el final de su contacto con la prensa luego del 1-0 obtenido en un partido que Argentina terminó con un hombre demás, por la expulsión de Joelinton. Luego, quitó el seguro del explosivo, que detonó: “Es parar la pelota y ponerme a pensar. Tengo muchas cosas que pensar en este tiempo”.  

“Estos jugadores nos dieron un montón durante este tiempo y necesito pensar mucho qué voy a hacer. No es un adiós ni otra cosa, pero necesito pensar porque la vara está muy alta y está complicado seguir ganando, y estos chicos lo ponen difícil”, intentó explicar.  

Las palabras resonaron estruendosamente. Nada dejaba espacio para pronosticar una declaración de ese tipo. Es que el grupo luce sólido y homogéneo puertas adentro, y también alineado a su idea futbolística. A ese dato extrafutbolístico, hay que sumarle que su equipo terminó el año como líder de las Eliminatorias, incluso hasta con cierta comodidad. 

“Toca pensar este tiempo”, insistió. “Esta Selección necesita un entrenador que tenga todas las energías posibles y que esté bien”, dijo, evocando las palabras de despedida de la Selección de un Marcelo Bielsa que viene de propinarle el primer tropiezo posterior al Mundial de Qatar al imponerse con autoridad en La Bombonera. 

Según deslizó, no sabían de esta situación los jugadores ni el presidente de AFA, Claudio Tapia. “Se lo diré después”, dijo. Las horas, los días y hasta los meses, quizás pongan blancos sobre negros sobre esta situación, con la Copa América de Estados Unidos a la vuelta de la esquina, a mediados de 2024. En ese torneo, Argentina, con o sin Scaloni, deberá refrendar su título de campeón continental, obtenido en 2021, casualmente, en el Maracaná.