Boca, a un paso de ser campeón: venció a Gimnasia y recuperó el primer puesto

Boca derrotó este jueves por 2-1 a Gimnasia y Esgrima La Plata, en condición de visitante, y volvió a la cima de la Liga Profesional, que finalizará este fin de semana con el Xeneize como máximo candidato a coronarse. Será una definición mano a mano con Racing, que está segundo, a solo un punto.

El encuentro fue la continuidad del que se suspendió el pasado 6 de octubre, por los graves incidentes que se registraron en las inmediaciones del estadio Juan Carmelo Zerillo, con represión policial, gases lacrimógenos y hasta una víctima fatal, César “Lolo” Regueiro.

Se trató, en definitiva, de un juego complicado para el equipo de Hugo Ibarra, no solo desde lo deportivo sino también desde lo estructural, porque tuvo que apelar a soluciones de emergencia al sufrir las bajas de dos figuras como Darío Benedetto y Frank Fabra, ambas por lesión, una en cada tiempo. Sin embargo, a pesar de estas adversidades, logró llevarse un triunfo clave para la lucha por el torneo.

Si bien el colombiano Frank Fabra adelantó al conjunto visitante a los 29 minutos del primer tiempo, asistido por Óscar Romero, a los 11 del complemento un frentazo de Leonardo Morales igualó el resultado provisoriamente.

Pero nueve minutos más tarde, el goleador Luca Langoni tomó un rebote de Rodrigo Rey, luego del disparo de “Pol” Fernández, y de un tiro al palo de Sebastián Villa, y empujó la pelota al fondo del arco para darle una vez más la victoria a Boca.

Las ocasiones de riesgo escasearon en el primer tiempo, cuando Hernán Mastrángelo omitió un claro agarrón de Nicolás Figal sobre Eric Ramírez que pudo haber significado la expulsión del defensor de Boca (el VAR no advirtió esa situación), y abundaron en el complemento.

Es que en esa segunda mitad se evidenció la necesidad de ambos equipos de lograr los tres puntos: el Xeneize para llegar con las de ganar al fin de semana y Gimnasia porque necesitaba esas unidades en el marco de su pelea por ingresar a la próxima edición de la Copa Libertadores.

Tras el 1-1 parcial del conjunto de Néstor Gorosito se vio lo mejor del partido. El trámite tomó el ritmo de un golpe por golpe, con tránsito fluido en la zona media y constante llegada a las áreas.

Parecía que Gimnasia, empujado por su gente, iba a dar otro paso. A punto estuvo con una ocasión que desperdició Ramírez, después de un error de Agustín Sández.

Sin embargo, un error en ofensiva y un rechazo largo tomó mal parada a la defensa local y generó las condiciones necesarias para que Boca contara con tres ocasiones consecutivas para convertir, en una misma jugada. La última fue la de Langoni, que no perdonó.

Los de La Ribera están primeros en el campeonato con 51 puntos, uno más que la Academia, y dependen de sí mismos para sumar otra estrella este domingo frente a Independiente en La Bombonera.

La suspensión tras los incidentes

Apenas 9 minutos jugaron Gimnasia y Esgrima-Boca Juniors el pasado 6 de octubre hasta que los graves incidentes que se estaban registrando en las afueras del estadio del equipo de La Plata obligaron primero a la interrupción del partido y pocos instantes después a la suspensión definitiva, por “falta de garantías”.

Muchos socios e hinchas habilitados pretendieron ingresar pero se encontraron con la puertas cerradas ya que la capacidad estaba colmada.

Empezaron los forcejeos, empujones y la represión policial. Y todo se tornó en un tremendo caos. Los efectivos dispararon balas de goma y arrojaron gases lacrimógenos. Esos gases llegaron hasta el campo de juego y los futbolistas sintieron los efectos.