Los Warriors, un equipo “desmoralizado”

Golden State caen por debajo del 50% de victorias tras perder con unos Heat muy cortos de efectivos. Haliburton maravilla ante los Bulls y LeBron y Davis se dan un respiro.

Los Golden State Warriors sufrieron una dura derrota en casa ante unos Miami Heat en cuadro. Los de Florida comparecieron sin Jimmy ButlerKyle LowryCaleb Martin y Josh Richardson, pero eso no fue impedimento para llevarse una victoria (102-114) que no es tan sencilla como parece por el récord del rival (los Warriors caen por encima del 50%, 14-15). Y es que el equipo de San Francisco, que empezó la temporada 1-6 como local, no perdía un partido en casa desde el 18 de noviembre. Acumulaba ocho triunfos consecutivos en la Bahía hasta hoy. Los Heat, entre el segundo y el tercer cuarto, le endosaron un parcial de 51-69 que dejó a su rival tiritando. Tyler Herro, con 26 puntos y 7 rebotes, fue el máximo anotador de un equipo en el que también destacaron Jamal Cain desde el banquillo (18+6), Bam Adebayo (17+11) y el rookie revelación de la temporada en MiamiJaime Jaquez Jr. (17+5+6). En los Warriors, tanto Stephen Curry como Klay Thompson se quedaron en 13 tantos y el equipo en general tuvo un día muy malo en el lanzamiento: 42% en tiros de campo, 24,2% en triples. “Nos desmoralizamos. Nos superaron en la dirección del equipo, en el trabajo y en el juego”, resumía Steve Kerr.

Haliburton emula a Chris Paul

Es uno de los hombres de moda en la NBA, sobre todo desde que llevara a los Indiana Pacers a la final del In-Season Torunament. Desde entonces Indiana ha bajado el rendimiento (4-6 de récord), pero Tyrese Haliburton sigue maravillando con su estilo espectacular, ofensivo y desenfadado. Y al mismo tiempo nada reñido con la eficiencia. Esta noche ha dado buena muestra de ello al ser el segundo jugador en la historia que llega a 20 puntos y 20 asistencias sin cometer ninguna pérdida. Lo hizo Chris Paul y ahora lo ha hecho él (21+20). Los Pacers ganaron así a los Chicago Bulls (104-120), contando también con los 24 tantos y 6 rebotes de Myles Turner. En los locales Patrick Williams (22) y DeMar DeRozan (21) fueron los máximos anotadores.

Unos Lakers sin resaca

Los Ángeles Lakers disfrutaron de un día tranquilo en casa, una vez superada la resaca del día de Navidad con la visita de los Celtics. Hoy tocaba recibir a los Charlotte Hornets, uno de los peores equipos de la Liga, y los angelinos aprovecharon la ocasión. El 133-112 final refleja lo que fue el partido después del descanso. Hasta entones estuvo bastante igualado, pero un parcial de 41-23 en el tercer cuarto dejó el encuentro visto para sentencia. Tanto que las dos estrellas de los LakersLeBron James y Anthony Davis, pudieron descansar todo el último periodo. El primero, a dos días de cumplir 39 años, metió 17 puntos y dio 11 asistencias en 25 minutos. El segundo se fue a 26 tantos y 8 rebotes en 26 minutos. Importantes carga de trabajo la que se han ahorrado los dos teniendo en cuenta lo que les viene. Mañana visitan al líder del Oeste, los Minnesota Timberwolves.

Sin Doncic no hay milagro

Los Dallas Mavericks cayeron en Minnesotta, donde los Timberwolves solo han perdido un partido, en un encuentro que no fue tan mal como cabía esperar por la ausencias a las que se enfrentaron. A la ya conocida de Kyrie Irving se sumó la de Luka Doncic, con problemas en el cuádriceps que se agravaron el día de Navidad, según su técnico Jason Kidd“Nunca estamos satisfechos con una derrota, pero creo que hay muchas cosas que podemos rescatar del partido de hoy. La energía, el esfuerzo, cómo hemos competido. El banquillo ha estado realmente bien”, comentaba Kidd. Y es que los Mavs no se dejaron avasallar, más allá del primer cuarto (37-26) por un rival intratable la mayoría de la noches. Las pérdidas de los Wolves, 22, se tradujeron en 29 puntos de los texanos, que tuvieron en Tim Hardaway Jr. a su mejor hombre en ataque: 32 tantos, 18 de ellos en la segunda mitad. Un parcial de 15-3 en el tercer cuarto comandado por Antohny Edwards (44 puntos) puso otra vez por delante a unos Wolves que llegaron a verse por detrás en el marcador. En el último periodo los Mavs consiguieron reducir la desventaja a -4, pero unos triples consecutivos de Kyle Anderson les dejaron sin opciones.

AS