Panorama nefasto para el Barça

Nueve lesionados, tres tocados, otros tantos acalambrados… Este es el panorama que afronta el Barça a tres semanas del partido ante el Nápoles de la Champions.

El FC Barcelona está sumido en un auténtico atolladero. Las numerosas lesiones y la preocupante condición física de algunos jugadores le han sumido en una situación límite, con LaLiga prácticamente perdida y la eliminatoria ante el Nápoles en claro riesgoXavi Hernández, un tipo optimista por naturaleza, no se podía imaginar, ni por asomo, que en el mes de febrero se encontraría en una situación tan demencial, con prácticamente media plantilla diezmada por las lesiones y con algún superviviente malviviendo renqueante por los campos de España.

Entre los lesionados no hay duda que las bajas de Gavi y Ter Stegen son las que más mella han hecho al equipo. El primero era el espíritu y alma del equipo y el segundo, el líder a la sombra. Sin estos dos pilares tan importantes, el bloque se ha venido abajo, como un castillo de naipes. Otras bajas como Íñigo Martínez, Raphinha ahora Ferran Torres han servido para debilitar más a un equipo que ya empezó la temporada con muchas dudas. Y, para rizar el rizo: Alejandro Balde, Sergi Roberto, Marcos Alonso y Joao Félix también se han sumado a esta espiral de desgracias.

Además, los casos de Íñigo, Balde y Ferran son especialmente sangrantes al tratarse de lesiones fortuitas cuando sólo llevaban unos minutos en el terreno de juego -en el central vasco la cosa fue aún más allá ya que se lesionó durante el calentamiento contra el Atlético de Madrid, es decir, antes incluso que jugar-. En este sentido, el nombre del preparador físico, Ivan Torres, sale en todas las quinielas como el principal responsable de este auténtico despropósito. Y lo peor del caso es que llevan tiempo intentado encontrar la respuesta a esta situación y aún no han dado en la tecla, como se pudo constatar este miércoles, con la lesión de Ferran a los cuatro minutos de haber empezado el partido.

Pero si ya esta dilatada de lesionados asusta al más pintado, aún hay más casos abiertos en la plantilla. Este miércoles se pudo ver cómo acababan el partido Ronald Araújo, Lamine Yamal y Joao Cancelo: deambulando por el terreno de juego, con problemas serios para desarrollar el juego y mirando al banquillo pidiendo consuelo. Los tres están ‘tocados’ de cara al partido contra el Alavés y habrá que esperar a su evolución para comprobar su disponibilidad.

Otros que no han trascendido, quizás porque juegan menos, como Andreas Christensen y Oriol Romeu, también llevan tiempo arrastrando molestias, que no les permite rendir al 100%, mientras que Pedri lleva ya muchos meses sin completar un partido, ya que los técnicos le están gestionando los minutos, conscientes que la fatiga muscular es la antesala de la lesión.

Y, por si fuera poco, los más jóvenes, como Pau Cubarsí y Héctor Fort, acaban los partidos con calambres: su constitución física todavía está madurando y acusa tanto desgaste e intensidad.

Con este demencial panorama, Xavi debe preparar la eliminatoria de octavos de la Champions ante el Nápoles, que se jugará la ida en San Paolo el próximo 21 de febrero. En el mejor de los escenarios posibles podría recuperar Íñigo, Ter Stegen, Marcos Alonso, Raphinha, Sergi Roberto y Joao Félix, aunque alguno llegaría muy justo.

Y si el panorama en la Champions es desolador, qué decir en LaLiga. A la larga lista de lesionados, tocados y acalambrados,hay que sumar la de jugadores apercibidos, es decir, que están a una tarjeta de la sanción. Aquí Xavi cuenta con cuatro candidatos: Araújo, Cancelo, Lewandowski y Romeu.

Con todos estos condicionantes, al que se ha de sumar el anuncio de Xavi que dejará el cargo el próximo 30 de junio, parece prácticamente una utopía que el Barcelona pueda salir airoso de las dos competiciones que aún sigue vivo.

AS